Ses Salines, el precioso pueblo hogar de Hotel Ca’n Bonico, se encuentra en el sur de Mallorca, cerca de algunas de las playas más bonitas de la isla. Aquí, la vida se vive sin prisas, rodeada de naturaleza y de las famosas salinas que dieron nombre al pueblo. Pero aunque reine la tranquilidad, en verano hay mucho por hacer. Porque si algo nos gusta en Mallorca es disfrutar de las fiestas de nuestros pueblos.
El mercado de Ses Salines
Empezamos por un clásico que se celebra durante todo el año, pero que no por eso pierde su encanto. Cada jueves, de 9:00 a 13:00 h, el mercado toma las calles del pueblo con una colorida variedad de productos locales: desde artesanía y cuero hasta ropa y lo mejor de nuestra gastronomía. Es el momento perfecto para hablar con los vecinos, disfrutar del ambiente y, de paso, apoyar al comercio local con alguna que otra compra especial.
Art Nit – Campos
¡Atención amantes del arte y la cultura! El viernes 1 de agosto, en el cercano pueblo de Campos (a poco más de 10 minutos en coche), se celebra la ya conocida Art Nit, una noche en la que todo el pueblo se transforma en una gran galería al aire libre. Edificios históricos se convierten en salas de exposiciones temporales con obras de artistas locales: pintura, escultura, instalaciones… Las calles se llenan de puestos de comida y bebida, y el ambiente es muy animado, ideal para disfrutar en familia. También es un punto de encuentro para los jóvenes, ya que hay música en directo, DJs y fiesta. Incluso si no eres muy fan del arte, es una excusa perfecta para descubrir patios y rincones que normalmente están escondidos. Si nos preguntas a nosotros, es una de nuestras fiestas favoritas.
Sant Bartomeu: la fiesta local por excelencia
En pleno agosto, Ses Salines celebra su fiesta patronal en honor a Sant Bartomeu, durante las dos últimas semanas del mes. De todas las fiestas que hay en Mallorca, esta celebración es conocida, porque también tiene lugar en otros pueblos como Montuïri o Sóller y combina tradición religiosa con música, cultura y mucho ambiente. Como siempre, habrá misas mercadillos, conciertos, bailes, fuegos artificiales y, cómo no, gastronomía mallorquina. Todo culmina con la Festa del Cavall, el último sábado del mes. Este evento ecuestre pone el foco en los caballos y sus jinetes -los caixers-, que realizan exhibiciones y acrobacias en la Plaza de Sant Bartomeu.
Ses Salines es un pueblo lleno de encanto: pequeños cafés, restaurantes, tiendas… Y si hablamos de playas… estás a pocos minutos de algunas de las mejores de Mallorca, con arenas blancas y aguas tan cristalinas que creerás estar en el Caribe. Pero no: estás en Ses Salines, en Mallorca. Uno de los lugares más bonitos del mundo.