El mar tiene una energía especial. Es donde nos relajamos, desconectamos de nuestros problemas y sentimos cómo la naturaleza nos invita a disfrutar del aquí y del ahora. En Mallorca tenemos la gran suerte de contar con una larga lista de playas y calas de belleza inigualable.
Y aunque hay muchísimas calas de las cuales elegir en la isla, hay unas pocas que nos parecen verdaderos tesoros mediterráneos. Por eso, hemos decidido compartir este post de blog, en el que os revelamos las 3 mejores calas escondidas de Mallorca.
Un paraíso en la Sierra de Tramuntana – Sa Calobra
Espectacular se queda corto para describir esta playa. De hecho, hay pocas palabras en el diccionario que transmitan la inmensa belleza de este lugar. Situada al final de una serpenteante carretera que ha aparecido en muchas revistas de ciclismo, la playa de Sa Calobra está rodeada por imponentes acantilados que conectan la Serra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con el mar.
La bajada hacia la playa es una experiencia en sí misma, que conduce a un pequeño pueblo de pescadores que ha conservado su encanto. Se accede a la playa a través de misteriosos pasadizos excavados en la roca, que acaban abriéndose a una extensión de piedras, arena y el agua más azul que jamás hayas visto.
Os recomendamos llegar pronto para poder disfrutar de la playa antes de que se llene demasiado, sobre todo en verano. Ten en cuenta que no hay ningún tipo de servicio en la playa, así que asegúrate de llevar agua, comida y lo que necesites para pasar el día.
Importante: A la playa también se puede llegar a pie a través del desfiladero del Torrent de Pareis, que es una excursión de nivel medio-avanzado que dura entre 3 y 5 horas.
Un secreto bien guardado con una ubicación de ensueño – Caló d’es Moro
Cuando ves por primera vez el Caló d’es Moro, sabes que es uno de esos momentos que quedarán en el recuerdo. ¿Por qué? Porque esta playa es el epítome de espectáculo mediterráneo. Mar turquesa, enmarcado por rocas escarpadas y frondosos pinos, donde sólo te acompañará el sonido de las olas.
Aunque cuesta un poco llegar andando a la playa, te prometemos que merecerá la pena. Otra forma de disfrutar de esta cala es en barco.
Importante: Se llena muchísimo en verano, por lo que te recomendamos ir en otras épocas del año o llegar pronto en verano.
Cala Marmols, un paraíso de arena blanca con nombre propio
Cala Marmols hace justicia a su nombre, ya que cuenta con algunas de las arenas más blancas que hayas podido ver, enmarcadas por acantilados de 20 metros de altura que añaden un efecto dramático a esta postal.
Una de las cosas que más nos gusta de esta idílica cala (aparte de su belleza, por supuesto) es su carácter privado. De hecho, la forma más fácil de llegar a esta playa es en barco. Si prefieres llegar a pie, tienes que hacer una larga caminata de 5 km desde el Cap de Ses Salines.
Cuando llegues a la playa, tómate tu tiempo para admirar la belleza que tienes delante, antes de coger tu equipo de snórkel y sumergirte bajo la superficie de estas aguas cristalinas. También podrás disfrutar de unas magníficas vistas de la isla de Cabrera, frente a la costa.
Un consejo: como esta playa está tan aislada, asegúrate de venir preparado con todo lo necesario.
Sea cual sea la cala que decidas visitar, en Hotel Ca’n Bonico te estaremos esperando para mimarte en cuanto vuelvas al hotel. Podrás pasar la tarde relajándote en nuestros jardines, junto a la piscina y con nuestros snacks saludables.