Como bien sabéis, el hotel está cerrado en estas fechas. Nuestras vacaciones de invierno acaban el 6 de marzo, que es cuando volvemos a recibiros en nuestro hotel. Pero esto no significa que no os recomendemos pasar las Navidades en Mallorca.
No importa en qué época del año visites Mallorca, esta isla siempre es un destino idílico para unas vacaciones mediterráneas. Y hoy estamos aquí para contaros cómo es Mallorca en Navidades.
Navidades en Mallorca
Lo primero siempre va primero: el tiempo en Mallorca es muy agradable todo el año. En invierno normalmente brilla el sol y no llueve mucho, a pesar de que de vez en cuando (¡y menos mal!) también tenemos lluvias y días más grises. Y si somos sinceros, creemos que el mejor lugar para pasar las Navidades en Mallorca es Palma, su capital.
La capital de las Islas Baleares es una ciudad apasionante, llena de cafés, tiendas, restaurantes, teatros, museos y galerías de arte que están abiertos durante todo el año. Además, las luces de Navidad que se encienden a finales de noviembre añaden un toque realmente mágico a las calles del centro de Palma, ¡simplemente precioso!
Tradiciones y celebraciones en Navidades en Mallorca
Para realmente contagiarte con el espíritu navideño lo primero que tienes que hacer es visitar algún mercadillo de Navidad. Cada ciudad y pueblo suele tener el suyo propio instalado en las calles del centro de la ciudad. Sin embargo, para nosotros, los mercadillos de Navidad más mágicos de la isla son el de Puerto Portals y el del Pueblo Español.
Si quieres vivir la experiencia auténticamente mallorquina durante Navidades, tienes que pasarte por la catedral de Palma el día 24 por la noche, donde se celebra una misa especial a medianoche. En lo que respecta a Nochevieja, hay ambiente festivo toda la noche en el centro de Palma: música por las calles, celebraciones y fuegos artificiales se pueden ver por toda la ciudad.
Probablemente la tradición / celebración más auténticamente española es el día de Reyes. Es una gran celebración que tiene lugar el 6 de enero, celebrada para recordar a los tres sabios que trajeron al niño Jesús oro, incienso y mirra. La noche anterior, el día 5, los Reyes llegan a puerto, visitando distintas ciudades de la isla con una gran cabalgata. La más espectacular es la de Palma, donde los niños reciben a los reyes y sus grandes carrozas desde las cuales arrojan chuches por todo el centro de la ciudad.
A la mañana siguiente los niños despiertan solo para ver que los Reyes han pasado por casa y les han dejado regalos y es con este día se concluyen las celebraciones navideñas en Mallorca.